Ocultos... los
retiros del pecado
gastan hoy
los pasamanos,
recurrentes
vaqueros cortos…
sed
y aquel
sabroso trapecismo bajo el brazo.
Bohemia
sigues en la imaginación
de este aprendiz
de palabras,
blanca sobre
el paisaje mudo…
creyendo en mis
burbujas de diminuta inmensidad.
Confieso que
regreso
a esas
plazas donde te invento
y brotas ágil…
a penas con arresto,
así como por
última vez
tan blanca
sobre el cuadro callado.
Prisas y
pupilas lo ocupan todo
pero siguen su
viento sin ver…
transeúntes
despistados,
labios que
ignoran mis notas
sobre tu piel
clara y su tierno apólogo…
Retiros del
pecado susurran…
rincones
salvajes e invisibles
que te incitan…
te invitan a
pasar descalza
por el confuso
eje de la realidad.