La vida rueda sin descanso, el trabajo y el ritmo impuesto dejan pocos momentos para tomarse un téyalmendras. Este rato es el único para relajarme, para disfrutar del mundo y de la vida. Con la cabeza apartada de lo banal, del paso vital y el juicio del tiempo. Abstraído de todo… justo en este momento comprendo lo que soy, lo poco que importa lo que hace un rato tanto me preocupaba… Teyalmendras es la bitácora donde caben mis pensamientos; recogidos, alejados de la normalidad y la rutina…



domingo, 29 de enero de 2012

Una pizca de tristeza


Peldaños cincelados en mi pecho
caen hasta la debilidad profunda
de un amargo cuerpo abierto…
quebrado por aquellos primeros sueños
que paso a paso
los años fueron cumpliendo.

A la deriva
entre muros que avasallan
se inundan mis pulmones cansados
y aturdido,  ansío gritar…
rugir hasta rasgar mi boca marchita.

Hoy sé…
que me seduce tu atajo,
el final obsceno del silencio
partiendo en el último tren…
para tropezar con los latidos perdidos
de mi negro corazón inanimado.

¿…Y que nace de las sonrisas?
pasa la gente aliviada
con su piel preñada de vida…
la respiro al cruzar,
ansío su vehemencia
y la inhalo con el ímpetu instintivo
de quien se sabe culpable
cayendo al vacío.

Al enjuagarme en los charcos
se esfuma el reflejo
y solo deseo seguir huyendo,
solo huir
ahuyenta los recurrentes murmullos
que afilados hieren mi cabeza.

domingo, 22 de enero de 2012

Descalza y muda


Saliva en mi almohada,
sabanas claras que resbalan
como la lluvia menuda
de tus nubes fecundas.

Desde el zaguán se arrastran
las luces del día,
sus sonidos…
rumores de una mañana adormecida
que despunta tibia y sin motivo.

Pasó de largo esta noche,
con ella tú…
como una sombra celeste,
tras las caricias sedosas
y tu elegante batir.

Sutil saliste en la mañana,
ahogando el tiempo...
descalza y muda.

Se despierta ahora
mi relevada conciencia…
deletreando besos,
encogiéndose en  la cama
al ardor de tu recuerdo.

Apuro la estela de perfume
que olvidaste con las prisas,
la sonrisa callada…
los vestigios que siempre dejas
para que recorra de nuevo
el tímido secreto de tus huellas.

domingo, 15 de enero de 2012

Reposo y piel


Cuelga la luz junto a tu cama
como un respiro paciente, meloso…
un cumulo en fricción que arropa tu piel
contra desiertas sombras que habitan
las cuencas fáciles de tu cuerpo.

Finges el sueño entre las sabanas,
al abrigo quieto de mis ojos…
reposas desnuda
sabiéndote empañada en un mar de suspiros.

Hoy eres la hoja seca que flota crédula
en los eternos lagos perdidos …
persistes bella,
presumes derrotas, recuerdos,
años dormidos…

Tus curvas calladas deshilan silencios
y elevan rotos mis latidos…
intuyo en ti el intrépido movimiento,
el abrazo próximo,
el candor espontaneo de nuestro encuentro.

Son besos amargos los que espero
y no me atrevo a darte…
solo me asomo a tus sentidos
tanteando la vertical altura
que te inunda el alma en su trayecto.

Finges el sueño entre las sabanas
al abrigo quieto de mis ojos…
reposas desnuda
sabiéndote empañada en un mar de suspiros.

En tu almohada florecen anhelos
y a tu lado resisto mudo,
la luz te baña y envuelve
en estos minutos densos
que llenan con silente calma mi habitación,
el lienzo vacio.

sábado, 7 de enero de 2012

Tras la lente


Caricias de luz y espejo
musitan savia en mis pupilas…
breves instantes mojados en color
que el tiempo arrastra hasta su orilla.

Giran los dedos sobre el objetivo
y desclavan un disparo…
atrapando cometas rojos
en noches tersas de verano,
 viajes distantes…
pozos perdidos de memoria.

Asomado al artefacto
trepano vivencias mudas,
corredores de sueños…
tomo sonrisas y cabello húmedo
en sucintos rostros de arena y viento.

Te busco en las nubes rotas de la tarde,
en parpados cerrados, fotogramas…
juegas enjaulada en sombras
hermosa tras la lente,
como un pliego de luz y primavera.

Periferias,
pellizcos de brisa templada,
líneas en cartulina,
melancolía desnuda y hierba…

Enfoco y detengo…
solo olvido un silencio quebrado
por la afilada prisa del ceñido diafragma.