La vida rueda sin descanso, el trabajo y el ritmo impuesto dejan pocos momentos para tomarse un téyalmendras. Este rato es el único para relajarme, para disfrutar del mundo y de la vida. Con la cabeza apartada de lo banal, del paso vital y el juicio del tiempo. Abstraído de todo… justo en este momento comprendo lo que soy, lo poco que importa lo que hace un rato tanto me preocupaba… Teyalmendras es la bitácora donde caben mis pensamientos; recogidos, alejados de la normalidad y la rutina…



martes, 31 de mayo de 2011

Tarde de siesta



Tarde tórrida de pueblo,
persianas echadas…
un perro ladra en la plaza,
juro y maldigo…
saliva en la almohada.

El tiempo sonríe ignorado y…
ahí fuera, el sol hostiga pleno,
tañen campanas,
 las cinco…
otro revuelco en la cama.

Habitación oscura
sobre sabanas claras,
silencio denso…
todos descansan,
resbala el aire por las rendijas…
aire atrevido y fresco.

La media tarde se anuda lenta,
destila su pausa y pereza…
hastío caliente en las calles,
yo… me abandono,
me derrito velado
en el dulce placer de la  siesta.

domingo, 29 de mayo de 2011

No es palabra...



Musitan su aliento mis dedos
en las betas de tu cuerpo,
dulces pliegues escondidos…
contorsiones de universo.

El amor ya no es palabra
ahora es aire,
surco quebrado,
efluvio y mística…

Es oleaje en el espacio
que nos segmenta y desbarata.

Acaricio con los dedos
tus mechones engarzados,
arrastrándome por sueños
que cabalgan tras tu encanto.

El amor ya no es palabra
es tormenta en la mañana,
hoja recia por mi pecho,
es la herida que no sana.

Cada beta en tu figura
el sol siembra de alboradas,
días claros que disfrazan
plomo gris, frio y escarcha…

Luna, encanto…
a cada verso que reflejo
el amor ya no es palabra.

viernes, 27 de mayo de 2011

Despistado



Persiguiendo mis sueños acabe alejándome demasiado del inicio, de mis raíces, los afectos…  de todo aquello que amaba.
Cada segundo insistí, avance más y más… adelante, obsesionado con la certeza de alcanzarlos en un futuro.
Olvide lo que iba quedando tras mis pasos, la esencia, lo que sucedía a ambos lados del camino, con la mirada dirigida siempre al frente... obsesionada y ciega.
Desfilaron los días, meses, tantos años… se escapo el tiempo a borbotones, filtrándose como agua clara entre mis manos, trémulas y torpes.
Fue ya tarde cuando reconocí, que en realidad el sueño fue olvidándose a mis espaldas, disipándose como vaho en la distancia... con lo efímero de la vida.
Caí en la cuenta… aquello tan maravilloso que deje atrás es lo que soñé encontrar durante tanto tiempo perdido.
A menudo cuando lo poseemos todo, rumiamos… pensamos que nos faltan muchas cosas… allí, en la intangible distancia que dibujan los sueños.

miércoles, 25 de mayo de 2011

Sin vuelta



Llueve polvo en la mirada
temblorosa del sediento,
apuesta de perdedores
pasaporte de lo incierto.

Piel mojada por mareas
 Torpe travesía bajo el cielo,
riesgo… laberinto al horizonte,
ventura del desconsuelo.

Extenso bagaje al hombro
sin retorno… con mil dudas,
en la costa ellos esperan
acechando la cordura.

Navegantes sin mas vuelta
que el rumbo a la decencia,
de frente rompen las olas
despertando su violencia.

Esta muerte es enemigo
de quien aprecia su vida,
no deseas mas tormentos
solo el sueño de la huida.

sábado, 21 de mayo de 2011

Nuevo Sol...


Hoy llueven sueños en cada plaza,
entre la gente,
en las desperezadas conciencias…

Sueños antes perdidos en barracones,
olvidados en húmedas galerías
de indiferencia y tristeza.

Ilusiones disimuladas bajo las camas,
los dobles fondos y cajones ocultos…
utopías contenidas tras la rabia,
el pétreo rigor del miedo…

Hoy todo revienta imparable,
de golpe la mentira se descose y
sale a la luz el hambre de la vida…
el ansia gutural en lucidas sacudidas
de dignidad y de decencia.

Las plazas argumentan sus colores
elevándose en la noche…
se despojan inequívocas de la cobardía,
bailan gozosas y esperan…
esperan el nuevo Sol
que traiga lento la luz del día.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Antiguas notas


 
Antiguo cuaderno de notas
que insistes tatuado
eres morada perenne…
eco, estancia  lejana,
libre ideario así  contenido
en un oasis, cuartilla…
de recuerdos.

Capsula perdida en los tiempos
embalas y atrapas
evocando recados del ayer,
aroma en la distancia
su música…
 el color vaporoso de lo que fue.

Hojas remangadas en los bordes
plegadas por mis bolsillos,
trazos descompensados
líneas paralelas que…
absorben mansas la palabra
el oblicuo equilibrio.

Atesoro antiguas notas,
las conservo…
esperan en la maleta desnuda,
los días de nostalgia las rescato
y  siento aquella brisa,
brisa ausente de lo ya cumplido.

domingo, 15 de mayo de 2011

Silencias tras el vestido...



Silencias tras el vestido
paroxismo en movimiento,
perfil de enredos que adivino
en la silueta firme de tus pechos.

Con cada esencia tu piel aborda
la frágil mesura de lo prohibido,
el espacio se hace añicos
proyectándose contigo.

Son delicia los retozos que me allegan
al dulce remanso de tu pecho,
tentador, feraz , de tacto delicado…

Ahora eclipsan dóciles mis manos
los intersticios del destino,
las miradas son las palabras,
manan descritas…
cosidas al camino.

Ya colman tus rebosantes senos
mi deseos y requiebros,
hunde tu amor en caricias...
dispérsalas en tu universo.

viernes, 13 de mayo de 2011

Escondes tu travesura



Sonríes y escondes tu travesura
entre las hojas de los almendros,
eres delicada curvatura poética…
espuela y bálsamo del deseo.

Erguida eclipsas horizontes
musitas ecos tras las laderas,
se aleja el viento con mil recuerdos
y la cadencia de tus caderas.

Tu, mi capricho eterno, amor honesto…
curva volátil de antiguos anhelos,
ángulo muerto en la tristeza
un pozo fresco en mi sosiego.

Descansa tatuada la locura
en los encantos del movimiento,
las finas líneas que traen tu espalda
el fiel latido desde tu pecho.

Sonríes y escondes tu travesura
en sombras rotas por nuestros cuerpos,
colmas mi ansias con tus abrazos
prendes mi alma en cada beso.

domingo, 8 de mayo de 2011

Pasan nubes



Desorden lento y caprichoso
de esponjosas nubes,
las olas distorsionan su imagen
devuelta a desgana por el mar.

Tu y yo absorbemos el momento,
cómplices… dichosos de estar juntos,
contraes perdida mi mirada
en tantos agradables pensamientos...

Soy el padre más feliz del cosmos
tanto como nunca he sentido
antes de tu llegada.

Pienso en la suerte…
en tus pequeñas manos,
en enseñarte el mundo,
 en protegerte…

 Pasan flotando más nubes!
nos miramos y reímos…
divertidos soñamos despiertos…
 imaginando que son de algodón,
jugoso algodón de caramelo.

jueves, 5 de mayo de 2011

Llegas con el dia



Te deslizas descalza
desenfocada en el pasillo,
sin ruido… buceas por vías lácteas
en el tierno espesor de nuestra alfombra.

Caen de golpe tus zapatos…
los recoges torpe,
tanteas a oscuras entre espesas sombras.

Ingrávida, buscas alinearte con los astros
 orbitas escorada y te cambias de ropa...
mudas lenta tu piel usada.

El sol entra por la ventana… y recita luz,
narra como te engatuso la noche,
su magia, su ruido, sus disparates.

Tu ropa arrugada salpica el suelo
aquí…   allá…
caminas desnuda
el agua fría moja tu nuca, apartas el pelo…
mácula triste de rímel resbala.

Capsulas de milagroso paracetamol
con zumo frio de pomelo.

Es muy pronto y… llegas tan tarde,
turbada te entregas al sueño,
retornan ecos de ambientes cargados
recuerdos de estrechos bares…

Yo intranquilo…  simulo dormir,
tu esperas confundida que todo esto pase.

lunes, 2 de mayo de 2011

Metamorfosis de las letras



 Escupe en la palma de sus manos y continúa surcando los campos. A través de la herramienta de labranza escurre su sudor amargo y la hierba claudica resignada a cada pasada, a cada rechinar de dientes ahogado en el resoplar de sus viejos pulmones.
 El sol castiga sin tregua la piel agrietada, cobriza… casi negra de un trabajador cansado, de un hombre sumido en las ansias de colmar el sustento de su familia.
 Desde la mañana a la noche brega sin romperse, sin más demanda que una mísera pausa, un descanso para tomar su pobre almuerzo envuelto en un viejo papel desecho.
 Por suerte todo cambiara para él en el mismo instante en que aquel papel llegue a sus manos. En el momento que el destino le abra la puerta dorada del conocimiento. Lo estudiara, lo tentara cada noche y cada día, robara horas y horas al sueño leyéndolo una y mil veces.
 Al poco de comprenderlo se irá dando cuenta de cuál es su verdadero sitio en esta vida efímera, y persiguiendo con ilusión las palabras,  cambiará… será simplemente un hombre feliz. Cada vez que mire hacia atrás se alegrara de haberse podido destilar en su esencia, en la metamorfosis magica de las letras.