Desde la antorcha
del faro
descubro el mar
satinado,
horizonte argente
ondulado
donde la espuma
se bate.
Ruge el brillo
en las olas
cuando en la arena
se agotan,
lamen la playa
mareas,
surcan el cielo
gaviotas.
El mar abraza
la roca
en un estruendo
la azota,
la sal se funde
en la brisa
que del océano
brota.
Playa de Noja
hechizada
milenios labran
tus formas,
porosas rocas
salpican
tu fina arena
dorada.
Versos concisos para retratar un rincón muy especial.La conozco bien.
ResponderEliminarUn saludo
Precioso lugar al igual que los versos descriptivos.
ResponderEliminarSaludos.
Que bonito poema y un placer visitar tu blog.
ResponderEliminarUn besico
En la playa del Ris mi abuelo me enseño a nadar, pasee con mi primera novia y he enseñado a nadar a mis hijos.
ResponderEliminaramo esa arena y la mar que la ahoga, gracias por dedicarle esa bella composición.
Noja e Isla, unidas por el mar. Sólo conozco un lugar que me pueda gustar tanto.
ResponderEliminarMe gusta el poema y me encanta la foto.
Un entorno proximo a la fantasia... sobre todo al amanecer. Uno de esos lugares en los que una persona se siente tan pequeña, que automaticamente empieza a hacerse todo tipo de preguntas sin respuesta. Muy recomendable visitarlo
ResponderEliminarSaludos :)