Aletean tus pestañas
liberando sus esporas,
esponjosos filamentos
que violentos me enamoran .
Vectores de mil deseos
un susurro en tu cintura,
lagrimas de lluvia fina
un potrillo sin montura.
Aletean tus pestañas
cautivando las pupilas,
localizas la atencion
horadando la mesura.
Incinera tu mirada
las pasiones sofocadas,
brota alma de un suspiro
cuando bates las pestañas.
Dios da pestañas a quien no tiene legañas.
ResponderEliminarUna poesía que se acomoda al corazón. Muy buen blog, espero seguir leyéndote.
ResponderEliminarSaludos
Tere Avellaneda