Silencias tras el vestido
paroxismo en movimiento,
perfil de enredos que adivino
en la silueta firme de tus pechos.
Con cada esencia tu piel aborda
la frágil mesura de lo prohibido,
el espacio se hace añicos
proyectándose contigo.
Son delicia los retozos que me allegan
al dulce remanso de tu pecho,
tentador, feraz , de tacto delicado…
Ahora eclipsan dóciles mis manos
los intersticios del destino,
las miradas son las palabras,
manan descritas…
cosidas al camino.
Ya colman tus rebosantes senos
mi deseos y requiebros,
hunde tu amor en caricias...
dispérsalas en tu universo.
Es que el cuerpo de la mujer es tan bonito... algo artístico en verdad!!
ResponderEliminarY a mí que me gustan los hombres, caray!!
Un gran poema para comenzar mi mañana, gracias por compartirlo.
ResponderEliminarGracias por vuestras palabras... por vuestra atencion...
ResponderEliminarSaludos a las dos ;)