Apareces tras la puerta
que no existe en la pared…
en la luz de mi pasillo
escuchando te encontré.
Atrevida en mi almohada
ocupas cada silencio…
y sonríes, y me atrapas
susurrándome tus cuentos.
Tejes ilusiones mudas
conjugando el firmamento
yo me asomo a la ventana
para contemplar tu efecto.
Apareces tras la puerta
que ni existe en la pared…
te adelantas a mis sueños
escapas entre mis pies.
Asomas divertida tu sonrisa
en la distancia mediterránea…
que tan distraída llega.
Habitamos el instante
en que el eco al fin nos une,
casi puedo acariciarte
dibujando tu perfume.
Pero siempre te me escapas
y apareces otra vez,
volvemos a conjurarnos
enredándonos también.
Ahora sé que tus palabras son ecos
suspendidos en un mar de certidumbre,
inexplicable…
tanto como su sabor intenso
y el cálido efecto que logran en mi.
Lindo que te digan algo así
ResponderEliminarDe una belleza infinita, como el firmamento.
ResponderEliminarQue el efecto de las palabras ondule como el eco... es un sentir compartido que se enreda rebotando entre el espacio y el tiempo.
Un bello momento, aun rozando con los pies el suelo.
Beso Tey.
Bello poema, mucho afecto y calidez. Abrazos Marga.
ResponderEliminar¡Qué bonito! Tiene que ser precioso que alguien piense "eso" (lo que tú has escrito) de ti.
ResponderEliminarEnhorabuena por tus poemas.
Un beso.
Mª Carmen J.
¡Es precioso!
ResponderEliminarDe una gran sensibilidad.
un abrazo
Ojalá algún día alguien me quiera tanto que me escriba cosas tan hermosas como esto que te leo :)
ResponderEliminarMuchos besitos.
aparece e ilumina
ResponderEliminarDemacradas luciones mudas.
ResponderEliminarun besos
Me ha gustado mucho, pero mucho. Fresco y hermoso.
ResponderEliminarUn abrazo :)
lindo homenaje.
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